Tenia mucha
expectativa por Nepal…y no me defraudo.
Apenas
llegas te das cuenta que el país es muy pobre…porque el aeropuerto
internacional, que es el único que tienen, es tan o mas chico que nuestro
aeropuerto viejo.
Gente muy
humilde, muy buena onda, hablan perfecto ingles y algunos entienden y se
manejan con el español. Por algún motivo, cada vez que uno habla me
emociono…quizás es tristeza…pero no se si la tristeza es de ellos y su pobreza
o mas que nada de nosotros...por nuestra pobreza…porque aca te das cuenta que
con poco se vive feliz. Esta gente es la prueba viviente de la frase que nos
dijo el guía: “para ser feliz se necesitan dos cosas; ser positivo y tener paciencia”
Como
llegamos un día de manifestaciones, el ómnibus tuvo que dar bruta vuelta…unos 40
minutos mas de lo esperado…pero llegamos al hotel. El hotel es 5 estrellas y
céntrico. El centro de Katmandú es como la peor parte del borro, con un
transito espantoso y las calles hecha pate o de tierra y muchos comercios uno
pegado al otro.
Nos dieron
una bienvenida en el hotel como si fuéramos estrellas de Hollywood, con cámaras
y tragos. El hotel no pasa los estándares de limpieza de Lili y realmente
parece un 3…pero considerando la pobreza extrema que hay afuera, te das cuenta
por que es un 5.
Acá se vive
con 300 dólares por mes pagando un alquiler. Los ríos están contaminados y el
transito es imposible. No hay delincuencia mayor pero si carteles. No tienen
electricidad suficiente por lo que dos veces por día hay cortes programados.
Son la mayoría hinduistas por lo que no se come vaca y ellos se consideran más
abiertos que la India porque las mujeres andan de jean en lugar de usar un
sari.
Tienen
muchos terremotos y uno grande cada 70 años…el último fue en 1934…pero dicen
que uno grande que hubo al norte de la India en 2004 valió como para aliviar
esta zona por 60 años más. Por este motivo las casas no tienen nunca más de 4
pisos. No hay metro ni tren porque las montañas no lo permiten.
Mucha
corrupción y están tratando de crear una constitución hace como 3 años pero
siguen en proceso.
25% de los
ingresos viene del turismo. Un turista le da de comer a 9 personas.
La gente en
los negocios es súper amable y te muestran como funciona todo aunque no
compres.
Todo parece
ser muy barato, 1 dólar son 88.5 rupias nepalesas y hay cosas hermosas para
comprar. Una lata de coca vale 50 rupias en el hotel. Obvio que se regatea a la
mitad de lo que te dicen…incluso cuando fuimos a cambiar dólares…
Lili esta
de muy mal humor porque no le gusta nada…espero no contagiarme porque realmente
este país me fascina y desde ya lo digo, seguro que volvería, pero con mis
hermanos, no con Lili.
Besos.Salva.-
Buen relato!
ResponderEliminarPor un poco pude sentirme casi como estando ahí, solo que con algunos comentarios sobre tu punto de vista.
Primero que nada, Lily: No entiendo como puede generar mal humor estar ahí. Por lo que describen, más que mal humor, la situación de ese país debería generar tristeza, bronca, impotencia, y ganas de cambiar todo. Pero nunca mal humor.
Me parece que tenés que hacerle un poco de caso al guía. Y más cuando no sos tu quien padece las dificultades de lo que ahí pasa (ni de lo que pasa acá), y estás viendo todo desde afuera, desde una burbuja inventada para los turistas.. Desde un hotel 3 estrellas, que para ese país es de 5. Se pusieron a pensar cómo vive el más pobre de los pobres, siendo que los hoteles más lujosos, no alcanzan uno mediocre de nuestro país?
“para ser feliz se necesitan dos cosas; ser positivo y tener paciencia”
Otro detalle: Salva; quién dijo que la pobreza en uruguay es triste?
Tal vez la gente que vive en asentamientos, no esté todo el dí de fiesta, pero sí muchas veces son más felices que los ricos. Riqueza no es igual a felicidad, ni viceversa.
Conocés la peor parte del borro para afirmar eso? Creo que no
Ojalá puedas volver. Sin dudas que estoy para acompañarte.
Saludos, y espero hayas pasado un lindo cumpleaños!
Un beso, los quiero
Seba